Desde el faro.

Soy discípula confesa del Prof. Nexus; ese mismo que siempre ejerció la docencia sobre sus tacones rojos. El me dejó su faro y toda su colección de literatura erótica. Me hizo comprender, lo vivas
que están esas - mal llamadas- lenguas muertas
.
Y un único mensaje, muy a la manera de Baudelaire: "Embriágate".
Y aquí estoy, desde la libertad y el placer.
Bienvenid@s.


sábado, 24 de octubre de 2009

Gorda.

A veces entro a chats de mujeres. Con la esperanza de mantener una conversación fluída, que pueda inspirarme en algún sentido. Como mi interlocutora es anónima, me provoca una curiosidad que - muchas veces, admito- es proyectada. Si tengo suerte, es un momento de desconexión con el entorno real. Me relaja.

Percibo carencias entre líneas. La mía sería esa búsqueda del estímulo que proporciona la novedad y lo desconocido. Es difícil, lo sé. Y lamentable apreciar el escaso nivel - también en actitudes- de muchas usuarias de estos medios. Encontrar humanidad....es ya un logro.

Charlaba con una mujer que se sentía mal. Por no "ligar" nunca. Al profundizar en los posibles motivos de este hecho, la respuesta fue rotunda: "Estoy gorda".
Esto me hizo pensar en algunas presiones, absolutamente innecesarías. Esa insistencia del sistema, por difundir un modelo de mujer mediático conforme a un canon de delgadez.
Se abren los amarios y las puertas. Pero, algunas parecen seguir siendo muy estrechas, no proporcionan un tránsito natural, para todo el mundo. Como un filtro sutíl y despiadado.
En términos sociales y estéticos, vemos cómo ese chico- desgreñado, con barba de tres días- coquetea con una mujer estupenda. Sin complejos. O ese gay "oso", divertido en un entorno que lo asume como uno más, en la variedad. Incluso esa amiga "hetera", coqueta, que se lo pasa estupendo, sin más...

Observo en los últimos tiempos, que el contexto de socialización les se está volviendo muy disciminatorio. En los lugares de ocio, te regalan esas miradas disuasorias que traducen un " Ni se te ocurra hablarme". Círculos cerrados de amigas que sólo hablan entre ellas. Endogamia en la forma de plantear la diversión -¿?- y reciclaje sentimental. Eso de " es la ex de la ex de tu ex".
No suelo frecuentar estos ambientes, no porque sea "cool". Voy donde me apetece y me siento bien.
El único motivo es...que me aburro. Me resulta muy artificial.
Respecto al físico, es importante aceptarse y cuidarse. Y creo que es definitiva, la actitud que destilamos en ese "estar". Ser persona.

Hablando de mujeres sexys...de esas con cuerpos que nunca se acaban....).


3 comentarios:

Miss Chigliak dijo...

Estimada Alter Higa:
Curioso que este post suyo (casi poético por cómo lo ha escrito) no haya producido ni un sólo comentario en un par de días. ¿Tampoco es cool comentar estas cosas?
En fin, lo primero que he pensado al leerlo es lo curioso que puede ser cómo nos vemos a nosotras mismas y lo que implica cuando nos definimos. Mi afirmación (por eso de la empatía) habría sido "soy gorda". El uso de un verbo puede cambiarlo todo. Sí, lo soy, soy gorda y quizá el matiz esté precisamente en lo que usted dice de aceptarse. Fui bebé rollizo, fui niña gordita, fui adolescente gorda (ni que decir de esas puertas estrechísimas) y soy mujer gorda (ahora las puertas son...). Así, tal cual.
Este post suyo daría mucho que comentar (no solo por los cuerpos que nunca acaban y que intuyo que sabría usted perderse por alguno de ellos) si no (también) por lo que comenta de los ambientes y las miras estrechas. Quítese ya el sostén y otras ligaduras y escriba por esos dedos ¡todo lo que sabe! hable de carnes, de muerdos, de lametones, de agarrar y soltarse, de perderse y encontrar; de restregarse, hable sin más, de tetas grandes o pequeñas, de mujeres y sexo!!
Un beso gordo

Alter Higa dijo...

A mi me gustan las mujeres inmensas, esas que nunca se terminan. Ya lo he dicho....
Pero ellas, deben saberse apetecibles, seductoras, con todas las posibilidades que ofrece el quererse a una misma. Y ofrecerse, como un festín de los sentidos.
Me enterneció mucho esa confesión....tan digna de romper tantas cosas de un mundo encorsetado y ciego. Tan ciego......

farala dijo...

hola aquí farala
soy obesa
jajajaaaaaaaaaaa

bueeeno y dicho esto, qué buena tu entrada, tu diatriba, añadele a esa fobia la de la edad, porque no es lo mismo estar gorda y tener 19 años que 41 para que te miren no mal, sino peor!!

te recomiendo que te pases por el blog de la letra escarlata (en mi-y muchas-barras laterales y chequees sus entradas "gordofobia". merecen la pena!!