Menéame.

No olvidar todas las letras. Un olvido consonántico nos llevaría a micciones que aquí no han sido convocadas. Por mucho que prometan delirios dorados. La pulcritud me hace cuestionar - que no desestimar- ciertas propuestas.
Hoy me he permitido el imperativo, quizá por la imperiosa necesidad de invocar semejante movimiento, en la complicidad. Peligrosas las nostalgias.
Creo que es algo deseable. Esa sacudida placentera que nos despeja las dudas y nos reconcilia con lo más inmediato del sentirse vivo. En definitiva: un buen meneo, para espabilar los sentidos.
Y en esto, sí hay grados. En mi escala de valores, se traduce en una cara frente al espejo: obscena.
La mirada brillante, la tez despejada y fresca, los labios turgentes y una sonrisa tonta que amenaza con asomarse sin motivo, cada vez que ciertas imágenes me visiten.

Me hubiese gustado mandar un sms con esa indicación: "Menéame". Saudades estivales de achuchones varios. Pero en mi agenda no encuentro destinatario-a. Qué derroche.....dónde irán los meneos que no damos.
Todo esto, para presentar un portal cultural de intercambios varios. Y que se llama así: meneame.net
Se trata de mover textos, noticias de aquí a allá. No sé lo que vuestras calenturientas mentes habrán pertrechado.....aunque admito que la cultura - aparte de abrir mentes- también abre algunas alcobas y los muslos que en ellas yacen.
Me temo que me quedo sola entre mis sábanas, con mis acrobacias.....)